13 oct 2015

Valdivia, la perla del Sur

Valdivia, la perla del Sur


Valdivia es una ciudad que no te puedes perder si estás recorriendo Chile. Capital de la XIV Región de los Ríos, conocida como “la perla del Sur” o la “Capital Cervecera de Chile”, y durante 2016 será también Capital Americana de la Cultura. Siguiendo nuestro viaje, dejamos atrás Pucón y llegamos a esta ciudad, cuyas calles están habitadas por el encanto del sur y algún que otro león marino. En este post podéis leer nuestra experiencia.


Viajando a dedo y bus

Antes de decidirnos por viajar a dedo estudiamos bien nuestras alternativas. El trayecto en autobús Pucón – Valdivia cuesta 4.500 CLP, un viaje que se hace en 2 horas y media. No es un precio desorbitado pero para nada es una ganga como el primer autobús que tomamos, y como teníamos tiempo y ganas de guerra, quisimos probar a hacer autostop.

Preguntes a quien preguntes te van a contar que hacer dedo en Chile es bastante sencillo, como todo lo que tenga que ver con compartir y abrirse a otras personas. Nosotros, aun siendo 3 no tuvimos mucha complicación. La clave está en andar mucho hacia las afueras dirección a tu próximo destino, ahí esperar a que alguien te pare, y muy amablemente preguntarle cuánto te puede acercar hasta tu próximo destino, cualquier kilómetro ahorrado será agradecido.

Y una vez lo consigues por primera vez va siendo todo más fácil. Podéis ver cómo fue nuestra experiencia en este vídeo:



A menos de una hora de Valdivia se nos hizo de noche, nos veíamos capaces de llegar siguiendo el plan inicial, sin embargo, para nuestra suerte, pasó un micro que iba hasta la terminal de autobuses por 1000 CLP. Considerando una victoria todo lo recorrido, no era mala idea una retirada a tiempo por un precio muy asequible y evitar que se nos complicase la vida en plena noche.

Valdivia

Valdivia nos acogió en nuestro primer día con un sol que según nos contaron es poco común, siendo la ciudad más lluviosa de Chile. A pesar de ser grande, si tienes ganas de andar y te organizas bien la puedes visitar completamente a pie. Comenzamos por la zona del Mercado Fluvial de Valdivia. Al lado del río , en medio del Paseo de la Costanera, bajo una carpa con forma de ola muy colorida, hay diferentes puestos dedicados a la gastronomía típica de la región. Abunda todo tipo de marisco que puedes ver preparar en directo para su venta mientras decenas de leones marinos, gaviotas y pelícanos esperan desde la retaguardia ansiosos por cualquier sobra que pueda llegar a sus bocas. Un lugar muy pintoresco que recomiendo visitar por la mañana, momento en que tiene más actividad.
Mercado Fluvial de Valdivia
Cruzando el puente puedes ver en cualquier momento del día embarcaciones de remo olímpico entrenando. Es tal la afición que hay por el deporte en la ciudad que si ves a un chileno en alguna competición internacional de esta modalidad, lo más posible es que sea valdiviano. Al otro lado hay varios museos y parques, nosotros pasamos el mediodía comiendo en el Parque Saval, es muy extenso, con bosque y pequeños lagos lisos que vuelven a parecer espejos, tiene obras de arte expuestas y gran cantidad de sitios en los que parar a descansar. La entrada cuesta 500 CLP.
Parque Saval
Justo en frente está la Universidad Austral de Chile, está en el Top 5 de universidades más prestigiosas del país. Pero no os recomiendo visitarla por sus instalaciones, lo que verdaderamente la convierte en una zona de interés turístico es su Jardín Botánico, de entrada gratuita.
Pone "Jardín Botánico", ¿no lo lees? ¿qué esperabas leer aquí?
De vuelta a nuestra pensión fuimos recorriendo calles del centro y conociendo mejor la ciudad, viendo arquitecturas de importancia como la Iglesia de San Francisco, o contemplando a los leones marinos disfrutar de los últimos rayos de sol. 

Un dato que quizá no conocíais para terminar de hablar sobre Valdivia: En 1960 se dio el terremoto más grande registrado de la historia de la humanidad, que destruyó prácticamente toda la ciudad. La mayoría de lo que vemos ahora es lo construido posterior al conocido como “Terremoto de Valdivia”.


La Capital Cervecera

¿Conocéis la Cerveza Kunstmann, famosa internacionalmente? Pues es producida en Valdivia, y su cervecería está abierta al público para todo aquel que quiera visitarla y consumir a un precio de regalo (para lo que suele costar). Nosotros no fuimos por falta de tiempo, pero no dejamos de probar la cerveza artesanal que tanta popularidad tiene en esta región. Todas las semanas hay feria de la cerveza artesanal. Os recomiendo un pub que quizá sea el más conocido en la ciudad por este hecho, es La última Frontera, aquí podréis degustar una carta entera de cervezas elaboradas artesanalmente. Personalmente, la que más me gustó fue la Cuello Negro.

Niebla

A 20 minutos de Valdivia, tomando la micro nº20 (600 CLP),  está el Fuerte de Niebla, de los castillos defensivos más grandes que construyó España en época colonial en América, cuando Valdivia era conocida como “La Llave del Mar del Sur”.  De este fuerte sólo quedan sus muros llenos de musgo y alguna fila de cañones oxidados apuntando al mar, a parte del faro. La entrada es gratuita y el paseo muy agradable.
Dado que la región nos seguía regalando sol en época de lluvia y nuestra mente estaba aún en el verano de España (aunque aquí en Chile era pleno invierno), dimos un paseo hasta la Playa de los Enamorados. Tienes dos accesos, uno bien lejos pero asequible, y otro a través de otra playa más cercana, bordeando acantilados sobre rocas a modo de trapecista, nosotros fuimos por el segundo. Como en cualquier otro lugar de Chile, fue muy gracioso ver a una camada de perros callejeros disfrutar de un día playa, jugando con las olas, ladrando a las gaviotas y contemplando la puesta de sol. El día fue tan bonito que hasta nos animamos a un baño en el Pacífico.

De todo lo que os he contado, mi amigo Alejandro transformo en palabras lo que percibían sus sentidos, haciendo otra maravilla en forma de poema:



Alojamiento en Valdivia

Pasamos tres noches en Valdivia: dos en pensión y otra con couchsurfer. En las dos primeras noches al ser tan improvisadas nos fue imposible hacer couchsurfing, por lo que fuimos a una pensión que encontramos genial de precio, preguntamos por habitaciones a 7.000 CLP la noche y nos dejaron unas que no imaginaríamos a ese precio, además no estaba muy lejos del centro a pie. Si llegarais a necesitarlo, podéis contactares a través de esta página de Facebook y pedirles tal cual habitaciones a ese precio diciendo que vais de parte de unos chicos españoles que estuvieron en Agosto del 2015.

La última noche la pasamos en casa de Daniela, una couchsurfer que se estaba estrenando como host (no con nosotros, pero si eran sus primeras veces), una cena y conversación muy agradable en la que aprendimos algunas sobre Chile. Y aprovechando que nombro y doy las gracias a Daniela, quiero dárselas también a Marco y su hermana por dedicarnos una noche Valdiviana. Otra experiencia más para seguir recomendando entrar en esta red social.

El viaje dio para más, terminada la estancia en Valdivia me separé de Alex y Eva y seguí hacia el sur, hasta Puerto Montt. Tengo tan seguro que volveré hasta ahí algún día para comenzar un viaje desde ahí a la Patagonia, así que creo que terminaré mi relato aquí.

Si quieres ver Valdivia como lo hicimos nosotros, te dejo el último vídeo de este viaje:



Serie en vídeos del viaje: El centro del Sur
Fotos del viaje en el álbum: IX Región y Valdivia

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